Abstract
Mientras escoceses, irlandeses y galeses no pueden ser obligados a permanencer dentro de la unidad –tampoco cuentan con buenas razones para salir de ella–, son los ingleses quienes los subvencionan financieramente. Los resultados electorales, junto al creciente desencanto popular por las decisiones de Westminster, podrían condicionar la futura configuración de la ‘quinta nación’ británica.
| Original language | English |
|---|---|
| Pages (from-to) | 10-14 |
| Journal | Vanguardia Dossier |
| Volume | 55 |
| Publication status | Published (in print/issue) - 3 Apr 2015 |